Hace unos días era Bad Bunny quien se dejaba pasear, revolcar y pelear entre las luces del escenario de uno de los mayores shows televisivos del mundo. El puertorriqueño se convertía en la estrella del Royal Rumble, llevando a cabo un movimiento que recordó de principio a fin a una de las leyendas de este deporte, el Rey Misterio.

Y como todo pasa y todo llega, Óscar Gutiérrez Rubio, a.k.a Rey Misterio, vuelve a la WWE. El tres veces campeón del mundo ha firmado un nuevo contrato que a priori comprende tres años y confirma una vuelta a la gran empresa tras ser un agente libre durante el año pasado. Esta vuelta significa pelear junto a su hijo, Dominik Misterio, también profesional de la lucha libre.

Como el mismo campeón confirma, el estará luchando hasta que le toque su hora, lo lleva en los genes: “Durante ese período, se me dio tiempo para pensar en lo que quería hacer por el resto de mi vida. Me senté con mi esposa y mis hijos, y finalmente tomamos la decisión juntos de que era hora de que regresara a la WWE. Estoy agradecido por esa oportunidad porque sabía que mi hijo quería ser parte de esta industria y yo quería reabrir la puerta para que Dominik eventualmente entrara en el negocio. WWE me ha tratado como si nunca me hubiera ido, y estoy muy agradecido y realmente bendecido por eso.

Vuelve al espectáculo uno de los más grandes, ganador de multitud de títulos y capaz de su máscara todo un emblema. Vuelve el Misterio.