No son pocos los artistas que a estas alturas se atreven a experimentar con diferentes géneros. Por un lado, es importante para salirse por un momento de su zona de comfort y probar cosas nuevas y, por otro, para renovar una audiencia deseosa de contenido inédito en el que los artistas arriesguen.
En ‘My Girlfriend’ hay un primer acercamiento de Lil Xan al indie rock que se popularizó enormemente allá por principios de los 2000.